A veces es bueno sentirnos tan livianos como las hojas del bosque o como la nieve del Valle de las Hadas para volar con nuestros sueños, crear mundos y formas posibles y respirar puros sueños y coger un nuevo aliento.
Por Johanna González
Especial www.noticiasalsur.co
Me invitaron a una maravillosa gala navideña: Tinkerbell y el Cuento de Hadas, y queridos lectores es maravilloso reafirmar que no hay nada imposible cuando se ve con los ojos del alma y con los sueños de infancia.
¡Que hermoso volver al mundo de Tinkerbell con el baile y la danza de los niños, ver que en el mundo de ellos no hay límites, que todo es posible con la pureza de una sonrisa y su máximo de espíritu!.
Ese maravilloso mundo me invitó nuevamente a soñar, a ser creativa y sobre todo tener la humildad encantada como polvillo de oro.
Ví abejitas hermosas, y recorrí el valle de las flores con unos ángeles vestidos de girasoles, pero también fui hasta el bosque donde aparecieron hermosos animales bailando en su primavera niñez, y también ví hermosas damas vestidas de verde esmeralda que encantaban la magia del servicio y creatividad de una hermosa Tinkenbell.
De repente unos ojos fuertes, firmes, me entretuvieron con su herramienta el pincel y me llevaron con todos sus movimientos, delicados, pausados y atentos, ella una ¡hadita hermosa! Vivaz, tierna y fuerte. ¡Qué lindo es el espíritu de la Navidad, que hermoso que eventos como estos fomenten la magia y los sueños sutiles en la niñez del Huila!, y sobre todo que maravilloso que a través de un cuento, fortalezcamos en los niños la magia de la niñez, una etapa que ojalá nunca se fuera de nuestra alma y nuestro sentimiento, aunque seamos grandes.
A veces es bueno sentirnos tan livianos como las hojas del bosque o como la nieve del Valle de las Hadas para volar con nuestros sueños, crear mundos y formas posibles y respirar puros sueños y coger un nuevo aliento. Ummmm! que linda es la Navidad. Feliz Navidad! Abrace más, quiera más y den más amor.
Por cierto como pura niña inquieta me fui al escenario y busque esos ojos hermosos, llamados Malú, una futura y prometedora gran bailarina del Huila. Le gusta pintar, el inglés y ¿adivinen? Bailar también. Gracias Malú por recordarme que soy niña….
Fecha: 11 diciembre, 2017
Divino el artículo, y es verdad mantengamos la magia en los niños.