Álvaro Ladino
De Pedro Hernán Suárez Trujillo, ya se advierte su próxima campaña, la gobernación del Huila. Según entiendo,requiere -entre otras cosas- mantenerse en la opinión pública si anhela alcanzar el objetivo.Sus primeros años como alcalde de Neiva, pasaron sin pena ni gloria, y solo al final se evidenció que su mandato inclinaría por las obras físicas que por lo social; la realidad es que lo primero es lo que gente más recuerda,premia o castiga en las urnas, y los políticos lo saben, mientras lo segundo es de valoración subjetiva,intangible,y al criterio de muchos,en dicha línea no salió bien calificado. No obstante, el ‘impacto’ de las gestiones en infraestructura, lo visual, el cemento y las edificaciones, que deja para la capital, es y será su carta de presentación; a lo que específicamente quiero referirme y evaluar grosso modo.
Dentro de las obras terminadas en la administración de Suárez Trujillo, en el aceptable del tiempo propuesto y no bien distribuidas geográficamente, se encuentran los primeros Parques Biosaludables de la ciudad,dos canchas sintéticas de Fútbol, la remodelación y techado de varios polideportivos. Inauguraciones que celebró en medio de bombos y platillos,con razón de promover escenarios de recreación y ocupación del tiempo libre. De igual manera se anotó un punto con la puesta en marcha del Reservorio.
El Estadio Plazas Alcid es lo contrario, una de las muestras bandera de su ineficiencia administrativa, dejándolo a medio iniciar y sin disponibilidad de recursos para el mismo. Sin embargo, está la ilusión que Rodrigo Lara lo termine,logro que tendrá que compartir con su antecesor. Ya transcurrirá el tiempo necesario para conseguir los 10 mil millones de pesos que culminaránsu remodelación, algo que cuando suceda,vivirá aún más fresco en la mente de la gente, yla aspiración electoral anunciada, a la puerta del horno. A mi juicio, toda una estrategia.Similar destino tendrá el Parque Ronda Rio Las Ceibas que avanza lentamente,y la Avenida Inés García de Durán, de la cual no hay señales de reiniciar labores;ambas serán acabadas no muy pronto, algo que a él no le afana.Por otro lado, a la Unidad Materno Infantil del Hospital Universitario y al Parque de la Música,si bien les falta poco pese a los retrasos, también los saldrá a relucir, y quedarán como vagos recuerdos el costo económico y ecológico que respectivamente lo srodearon.
En el olvido asimismo permanecerán los viajes a Brasil y a Japón,de Pedro con comitiva a bordo, sin que hoy estén repercutiendo en aprendizajes para la administración entrante, o que alguien me los diga. La sonada marcha contra el virus del Chikunguña y el salir a la prensa a decir que los motociclistas no tienen permiso para realizar una manifestación, son sus más relevantes alcaldadas condenadas al relego.
¿Qué decir de los errores e improvisación en la planificación de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales – PTAR y del Sistema Estratégico de Transporte Público-SETP?, solo estudios a la fecha, pero que han implicado una alta envergadura multimillonaria del presupuesto local. ‘Chicharrones’ para el alcalde actual.No dejo de citar al mayor ‘elefante blanco’en la historia reciente, el Parque Isla, que no será para mostrarlo, porque en este nada se hizo, más sí se utilizó para justificar gastos: la corrupción salta a la vista.
Todavía resta bastante para saber quién será el próximo gobernante de los opitas; y más tarde que temprano le saldrá algún fuerte competidor o competidora, quizá de apellido González Villa, que al parecer le gustó el cargo. Finalmente, desearle a Lara Sánchez le alcance más que los días, el dinero obligado para dar feliz cumplimiento a esta lista de obras, sin dejar de construir lo propio, los 60 kilómetros de bicicleta, los dos megacolegios y demás que prometió, algo muy bueno y no tan ambicioso. Dada la situación fiscal del municipio, ojalá y realice todo,¿lo logrará?