Fueron cuatro los ganadores del Concurso de Pesebres Ecológicos 2022 y que reunió a 40 comunidades en todo el departamento del Huila. Neiva, Suaza, Paicol y San Agustín fueron los municipios que sobresalieron por su creatividad, uso de material reciclado, mensaje ambiental y unión comunitaria a la hora de crear su pesebre.
“Con este trabajo artístico las comunidades demostraron el compromiso por la conservación y la protección de los recursos naturales con este emblema de tradición cultural que es el pesebre. Por eso felicitamos a todas las personas que durante esta época se dieron al trabajo de construir el pesebre ecológico”.
Los ganadores
Desde los cuatro puntos cardinales del departamento fueron escogidos los pesebres destacados por fomentar la cultura y la educación ambiental en el territorio, además de infundir las costumbres tradicionales de esta época del año.
En el norte, el pesebre ganador fue Ambientalitos, una obra comunitaria que hace énfasis en las especies en vía de extinción, elaborada, con pacas de huevos, icopor, bases de electrodomésticos, periódicos, envases y tapas de gaseosas, por los pobladores del barrio Puertas del Sol de la ciudad de Neiva.
“Con el ánimo de crear un proyecto cultural y ambientalista los niños, niñas, familias y adultos nos unimos para reciclar, reducir espacios y darle una segunda oportunidad a estos elementos que hoy forman el pesebre comunitario”, dio a conocer Maryi Rocío Piñeros Molina, líder comunitaria, quien junto a sus vecinos y durante un año hicieron el reciclaje para crear la obra que se llevó el primer puesto.
En el Centro, el primer lugar fue para Brillos Navideños, localizado en el parque principal de Suaza, donde además toda la decoración navideña del municipio, fue realizada en botellas plásticas.
Por su parte el Occidente escogió el pesebre Peregrino de Emaús, diseñado por las familias de la vereda La Lajita en Paicol.
Finalmente en el Sur se eligió el pesebre denominado El Roble, donde predominaron las figuras de animales silvestres. Esta obra fue construida en la vereda La Llanada del municipio de San Agustín
El concurso que buscó darle rienda suelta a la imaginación, creatividad, innovación y utilización de materiales cien por ciento reciclables a la hora de elaborar el pesebre, está en su recta final con el cierre de inscripciones y la fase de evaluación. Esta iniciativa, denominada XXII Concurso de Pesebres Ecológicos ‘Navidad en Paz con la Naturaleza’, quiso además fomentar las costumbres y la conciencia ambiental en aspectos de conservación de los recursos naturales.
Durante semanas las comunidades trabajaron con materiales que iban desde cajas de cartón recicladas de los supermercados, cáscaras y cubetas de huevo, botellas y tapa de gaseosa, papel de azúcar, retazo de tela, calceta de plátano seca, papel periódico, filtros, llantas, estopas, latas, piedras de río, fique, tela quirúrgica, entre otros materiales.
