Mujeres, protagonistas del emprendimiento mundial

Mujeres, protagonistas del emprendimiento mundial

De los 582 millones de emprendimientos que hay en el mundo, 274 millones son liderados por mujeres, de acuerdo con el Global Entrepreneurship Monitor (GEM). América Latina es la región más emprendedora del planeta. En Colombia, durante el 2024 se registraron 297.475 nuevas empresas, según Confecámaras, de las cuales, el 72,3% fueron creadas por personas naturales, mientras que el 45% de esas nuevas empresas generaron al menos un empleo.
Durante los últimos 25 años, las mujeres han asumido un papel cada vez más activo en la economía global a través del emprendimiento. Así lo confirma el Global Entrepreneurship Monitor (GEM) Women’s Entrepreneurship Report 2023/24, que revela un crecimiento sostenido en la participación femenina en startups, negocios consolidados e innovaciones de alto impacto. Pero también deja claro que persisten obstáculos estructurales que frenan su potencial.
En 2023, una de cada diez mujeres a nivel mundial estaba comenzando un nuevo negocio. La actividad emprendedora femenina aumentó un 76% en los últimos 20 años (pasando del 6,1% al 10,4% en 30 países analizados). Las mujeres representaron uno de cada tres emprendimientos de alto crecimiento y dos de cada cinco startups con foco exportador. Colombia, junto a China, Ecuador, Lituania y Tailandia, se encuentra entre los países donde las mujeres emprenden más que los hombres.
Este avance no es menor: el informe evidencia que las mujeres están cada vez más involucradas en la creación de empresas con impacto económico, social y ambiental. Aunque las mujeres están emprendiendo más, la brecha de sostenibilidad persiste: solo una de cada 16 mujeres tiene un negocio consolidado (de más de 42 meses), frente a uno de cada 10 hombres. Además, en promedio, las mujeres tienen 21% menos probabilidad de cerrar sus negocios que los hombres, lo que indica mayor estabilidad entre quienes logran superar las primeras etapas. Sin embargo, enfrentan mayores barreras para crecer, acceder a financiamiento y participar en sectores estratégicos como tecnología y minería.
El informe destaca que, pese a las dificultades, las mujeres son más propensas a adoptar prácticas de sostenibilidad y a reinvertir en sus comunidades. Un ejemplo inspirador es Aya Laraki, fundadora de Cuimer, en Marruecos, quien creó una empresa que transforma pieles de pescado en cuero sostenible, reduciendo residuos y ofreciendo alternativas éticas al mercado de la moda.
Finalmente, frente al panorama del emprendimiento femenino, el informe recomienda: visibilizar modelos de éxito, especialmente en sectores donde las mujeres están subrepresentadas; mejorar la recolección de datos desagregados, para entender mejor las barreras específicas; ofrecer formación inclusiva: con programas STEM y mentorías especializadas y ampliar el acceso a capital: con políticas de crédito justas, redes de inversión y leyes antidiscriminación.