Promover La Lectura: razón de ser de La Biblioteca Departamental ‘Olegario Rivera’ en sus 80 años

Promover La Lectura:  razón de ser de La Biblioteca Departamental ‘Olegario Rivera’ en sus 80 años

Por Miguel de León.
Una biblioteca nace por decirlo así, en el instante en que alguien toma un libro para leer, es decir, la lectura es por definición, la razón de ser de la biblioteca. Todos los libros hacen parte de la biblioteca y se buscan en ella. Pero igualmente, la biblioteca contiene la memoria de lo leído, no solo como memoria, sino también como tiempo futuro de todo aquello que falta por leer. La Biblioteca es configurada por la lectura y la determina la memoria del lector y las experiencias de la sociedad. La colección de libros de una biblioteca no pretende alimentar el ego de un intelectual sino que son, sin más rodeos, un instrumento de investigación y de conocimiento del mundo.
“Una colección donde los libros leídos son menos valiosos que los no leídos porque cuanto más se lee más crece el perímetro del conocimiento y más se da cuenta uno de lo que no sabe. Es decir, que cuanto más se lee más aumenta el espacio de lo que se ignora” (Humberto Eco). Es un espacio para la lectura y no la depositaria del conocimiento. Por eso, se insiste, entre más leemos, más sabemos, pero, más nos damos cuenta de lo que nos falta por aprender. De ahí que la infraestructura cultura mas bella que existen, son las bibliotecas y el objeto mas significativo del hombre, son los libros. Una biblioteca es la imagen representativa de una cultura no sólo por los libros que tiene, sino también por los libros que no ha podido tener.
Por eso, la Biblioteca Departamental Olegario Rivera lleva este nombre y no el de su familiar mas conocido, José Eustasio, por que fue Olegario quién donó la primera colección de libros, igual, que el primer monumento público a la ciudad de Neiva. Era un general inquieto y culto, con muchas inquietudes. Su primer director, el sacerdote Jenaro Diaz Jordán otro prohombre huilense, fundador del Centro Cultural del Huila, convertido luego en la Academia Huilense de Historia. Otros directores de la Biblioteca Departamental, Jorge Andrade Rivera, Guillermo González Otalora y Yezid Morales Ramírez. Desde el año 2009, su coordinación es ejercida por el escritor Miguel Darío Polania.

La Biblioteca Departamental fue creada por ordenanza departamental el 19 de mayo de 1945. Está considerada como la más importante del Sur Colombiano, ha liderado procesos culturales muy importantes para la ciudad y la región. Con una visión futurista para su época más que una biblioteca estaba concebida como un centro cultural de primer orden local nacional y departamental siendo modelo para otras bibliotecas públicas del Departamento. Facilita múltiples servicios de información, cultura y educación, constituyéndose en uno de los equipamientos urbanos públicos más relevantes del departamento del Huila
El sitio inicial escogido como su sede fueron las antiguas instalaciones del colegio nacional Santa Librada, donde ahora está el edificio del Palacio de Justicia, en la carrera 4 con calle 7. En el año 1974, es trasladado al llamado bloque cultural de la Gobernación del Huila, por la calle 9. En el año 2.000 se trasladó al edificio que actualmente ocupa en el Centro Cultural y de Convenciones José Eustasio Rivera. Las bibliotecas públicas son lugares de inclusión social y un punto de encuentro ciudadano en donde todos nos podemos encontrar en igualdad de condiciones y oportunidades para acceder a la información y a las manifestaciones culturales. Para ello, la Biblioteca Departamental Igualmente, es Biblioteca Patrimonial; la depositaria del acervo bibliográfico de la región. y la encargada de recibir el Depósito Legal, según la Ley 1379 de 2010. En ese sentido, la Sala Patrimonial Huila facilita a los investigadores y público en general tener información especializada sobre la región en los diferentes soportes; clave importante para crear memoria e identidad local. Esta política tiene por lo tanto dos ejes fundamentales: acceso a la cultura y memoria, que se realizan en la Red de Bibliotecas Públicas y en el sistema de bibliotecas patrimoniales.

Igualmente, existe servicios de Consulta en Sala y Préstamo Externo, Servicio de Información local, acceso a internet en sala de computo, promoción de lectura para niños. Una de las mayores fortalezas era la Programación Cultural propia de la Biblioteca, que se realizaba regularmente, la cual ha venido desapareciendo, por el poco apoyo entregado. En una región con marcadas diferencias sociales y económicas, y complejas dinámicas que fraccionan la sociedad y dificultan el reconocimiento de memorias, expresiones culturales y pueblos, no sólo hay que velar por la biblioteca, sino que vale la pena preguntarse por las funciones que ésta puede cumplir de cara a la comunidad y que lo ha estado haciendo durante 80 años.


*Escritor y Director de la Biblioteca.